- DAR EJEMPLO: los adultos somos un modelo de lectura para los niños y también para los jóvenes (aunque no lo creamos). Debemos leer delante de ellos y disfrutar leyendo.
- ESCUCHAR: en las preguntas de los que son más jóvenes que nosotros está el camino para seguir aprendiendo.
- COMPARTIR: el placer de la lectura se contagia leyendo juntos. Leamos cuentos, libros, revistas. También se pueden compartir listas de lectura, recomendados...
- PROPONER, NO IMPONER: es mejor sugerir que imponer. Hay que evitar el tratar la lectura como una obligación.
- ACOMPAÑAR: el apoyo de las familias es necesario en todas las edades. Aunque ya "sepan leer" no es escusa para interesarse sobre sus gustos, lo que están leyendo, aclararles alto...
- SER CONSTANTES: reserva todos los días un tiempo para leer; que sean momentos relajados, con buena disposición para la lectura.
- RESPETAR: los lectores tienen derecho a elegir. Estemos pendientes de sus gustos y de cómo evolucionan.
- PEDIR CONSEJO: el instituto, las bibliotecas, las librerías y sus especialistas serán excelentes aliados, pídeles consejos.
- ESTIMULAR; ALENTAR: deja siempre libros apetecibles al alcance de los niños y jóvenes. Cualquier situación puede ser un motivo para llegar a los libros.
- ORGANIZARSE: Ayudale a organizar su biblioteca, su tiempo... La desorganización puede estar reñida con la lectura.
lunes, 1 de diciembre de 2014
Diez consejos para hacer de los niños buenos lectores
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